¿MANTILLA SE VA DE BOCA?

Entre incrédulos y estupefactos, los peruanos vimos por la televisión al ex secretario general del partido aprista, Augustín Mantilla, mandarse con todo y en plena jarana partidaria por su libertad, sobre asuntos que deberían preocupar a su partido.

Como todos sabemos, el ex hombre fuerte del primer gobierno de García, recibió dinero sucio de la dictadura fujimorista a través de Vladimiro Montesinos y por ello fue condenado a prisión.Años después de estar privado de su libertad por corrupción y enriquecimiento ilícito, don Augustìn afirmó para todo el mundo que solo cumplió órdenes superiores como un soldado en duras circunstancias para su partido, por lo que la promoción 83 del APRA del distrito de Pueblo Libre le rendía un homenaje a su lealtad (¿?).

Pero no solamente alborotó el cotarro político con estas afirmaciones, sino que se atrevió a afirmar que en esta segunda oportunidad que le da el pueblo al aprismo, se está buscando la confianza con un gabinete multipartidario que durará poco y que los técnicos y profesionales apristas tendrán su oportunidad ( de chamba) después ? porque la gente nos mira con recelo, por nuestros antecedentes?? sentenció.La respuesta del APRA no se hizo esperar.

El propio Presidente dijo categóricamente que Mantilla no tiene lugar ni espacio en su gobierno. Del Castillo y Mulder también aseguraron que no tiene ninguna injerencia y don Aurelio Pastor manifestó que es un tema recurrente para atacar al aprismo y que además el ex ministro del interior es un expulsado, sin acordarse de que él mismo es un expulsado por haber sido secretario del congresista fujimorista Rolando Reátegui.

Lo claro del asunto es que Mantilla habló como aprista ante la militancia de su partido, como si fuera parte del gobierno, ofreció chamba y el actual Presidente regional de La Libertad, bastión del aprismo, le brindó su total apoyo.Claro que después lo negó todo, como hacen siempre los políticos y dijo que no iba a declarar, mientras nadie sabe el destino de los 30 mil dólares que recibió de Vladimiro y sus cuentas en el extranjero por la lentitud del poder judicial que es un colaborador eficaz para la impunidad.

¿Será una cortina de humo para buscar la prescripción? Es bueno anotar que el vocal que le dio la semilibertad a don Agucho, acaba de recibir una coima y ?pescado? infraganti con las manos en la plata, en medio del escándalo nacional.Las preguntas que se hace la sociedad civil con asco en un asunto que no tiene cuándo acabar, no tiene respuestas: ¿ A qué órdenes se refiere Mantilla? ¿Qué hizo con todo ese dinero?

¿Solo se benefició él y no el partido? ¿Por qué la mafia entregó ese dinero al secretario general del APRA y para qué? ¿Qué buscaba Vladimiro? ¿Qué silencios compraba? ¿Por qué don Augustín declara todo esto después de 4 años?

A la sociedad civil y al aprismo sobre todo, debe interesarles una profunda, severa y rápida investigación sobre estas declaraciones que no pueden quedarse en el olvido, salvo que el propio gobierno no pueda manejar a su militancia, porqué detrás de las declaraciones de Mantilla, hay peces gordos que gozan todavía de libertad.

Esta vez, el gobierno de turno no puede culpar a la oposición de desestabilizador como ocurre siempre, porque la ?bomba? vino desde las mismas entrañas del aprismo, aunque lo que dijo Mantilla no tenga un valor legal, nadie puede negar que si tiene un valor político que necesita una aclaración urgente por el bienestar del país y nuestra incipiente democracia.

Una vez más, los cínicos vuelven a ocupar las primeras planas y la escopeta de dos cañones vuelve a estar armada.