ELIANE KARP, UN "FENOMENO" FRUSTRADO
A estas alturas madame Eliane Karp debe estar disfrutando de los calores parisinos. Esto si ya retornó de Jerusalem, la tierra de sus mayores, y en donde es posible haya dejado los últimos shekalim que quedaban en su cuenta de ahorros.
También debe haberse enterado del estado de ánimo de la jueza anticorrupción Carolina Lizárraga, quien hasta el momento no encuentra explicación del porqué de la retiscencia de la ex primera dama a declarar como testigo en el caso de las firmas falsas que utilizó Perú Posible para inscribirse ante el Jurado Nacional de Elecciones en los comicios del 2001.
El humor de la jueza Lizárraga no debe ser el mejor, debido a que la señora Karp ha hecho caso omiso a dos anteriore citaciones, cuando se encontraba en Lima y tenía todas las facilidades para viajar en automóvil de Palacio de Gobierno para cumplir con este deber legal. El problema se pone de color de hormiga y no sabemos si su cónyuge, el ex presidente Alejandro Toledo, hoy descansando en Punta Sal, será capaz de exclamar: "Métanse conmigo, no se metan con mi mujer".
Esto porque según el artículo 139 del Código de Procedimientos Penales, no queda otro camino que recurrir a la fuerza pública para que la citada haga presencia efectiva ante la justicia. No es la primera vez que personajes públicos como madame Karp pretenden hacer cera y pabilo con la justicia peruana.
En estos días nomás, hemos observado anonadados cómo un viejo broadcaster, involucrado también en asunto de corrupción, se prestó a una actuación circense en el afán de burlarse de un juez. Este, felizmente, no cayó en la treta, ni del abogado patrocinante, ni del acusado patrocinado, y respetuoso de su deber dispuso la lectura de la condena que le correspondía a quien a toda costa pretende esconderse en la figura de la prescripción.
No es tan grave aún la situación de la señora Karp. Pero, eso no quita que se puede convertir en tal. Las razones sobran y distan mucho de aquellos tiempos en que José Barba Caballero, haciendo honor a su apellido materno, expresaba su convencimiento de que Alejandro Toledo llegó a ser presidente del Perú por "la belleza e inteligencia unida a su dulzura y dominio del quechua" que ostentaba Eliane Karp.
El tiempo, ahora, viene jugando en contra de la madame de origen belga. Esto porque con su pertinaz oposición a rendir cuentas ante la justicia, hace ver que en realidad se trata de alguien con una personalidad discola y poco sensata, que ya se sirvió del poder político y que, ahora, se está sepultando en las tinieblas de la condena colectiva de un pueblo que espero mucho de ella.
¿Qué quedó de aquella mujer que a comienzos del 2000, después de su segundo matrimonio con don Alejandro Toledo, era vista como una persona inteligente y repleta de las mejores virtudes humanas?. Al parecer, ya no hay nada de ello.
Y, por el contrario, la susodicha está repitiendo con una terquedad insoportable el afán de convertirse en un personaje de historieta, propensa a la trampa política y destinada a ser recordada como una heroina de pacotilla. Ojalá que recapacite. Cosa que parece imposible. En todo caso, esperamos que el Poder Judicial se haga respetar como tal.
También debe haberse enterado del estado de ánimo de la jueza anticorrupción Carolina Lizárraga, quien hasta el momento no encuentra explicación del porqué de la retiscencia de la ex primera dama a declarar como testigo en el caso de las firmas falsas que utilizó Perú Posible para inscribirse ante el Jurado Nacional de Elecciones en los comicios del 2001.
El humor de la jueza Lizárraga no debe ser el mejor, debido a que la señora Karp ha hecho caso omiso a dos anteriore citaciones, cuando se encontraba en Lima y tenía todas las facilidades para viajar en automóvil de Palacio de Gobierno para cumplir con este deber legal. El problema se pone de color de hormiga y no sabemos si su cónyuge, el ex presidente Alejandro Toledo, hoy descansando en Punta Sal, será capaz de exclamar: "Métanse conmigo, no se metan con mi mujer".
Esto porque según el artículo 139 del Código de Procedimientos Penales, no queda otro camino que recurrir a la fuerza pública para que la citada haga presencia efectiva ante la justicia. No es la primera vez que personajes públicos como madame Karp pretenden hacer cera y pabilo con la justicia peruana.
En estos días nomás, hemos observado anonadados cómo un viejo broadcaster, involucrado también en asunto de corrupción, se prestó a una actuación circense en el afán de burlarse de un juez. Este, felizmente, no cayó en la treta, ni del abogado patrocinante, ni del acusado patrocinado, y respetuoso de su deber dispuso la lectura de la condena que le correspondía a quien a toda costa pretende esconderse en la figura de la prescripción.
No es tan grave aún la situación de la señora Karp. Pero, eso no quita que se puede convertir en tal. Las razones sobran y distan mucho de aquellos tiempos en que José Barba Caballero, haciendo honor a su apellido materno, expresaba su convencimiento de que Alejandro Toledo llegó a ser presidente del Perú por "la belleza e inteligencia unida a su dulzura y dominio del quechua" que ostentaba Eliane Karp.
El tiempo, ahora, viene jugando en contra de la madame de origen belga. Esto porque con su pertinaz oposición a rendir cuentas ante la justicia, hace ver que en realidad se trata de alguien con una personalidad discola y poco sensata, que ya se sirvió del poder político y que, ahora, se está sepultando en las tinieblas de la condena colectiva de un pueblo que espero mucho de ella.
¿Qué quedó de aquella mujer que a comienzos del 2000, después de su segundo matrimonio con don Alejandro Toledo, era vista como una persona inteligente y repleta de las mejores virtudes humanas?. Al parecer, ya no hay nada de ello.
Y, por el contrario, la susodicha está repitiendo con una terquedad insoportable el afán de convertirse en un personaje de historieta, propensa a la trampa política y destinada a ser recordada como una heroina de pacotilla. Ojalá que recapacite. Cosa que parece imposible. En todo caso, esperamos que el Poder Judicial se haga respetar como tal.
posted by La Indiscreta at 9:40 a. m.
2 Comments:
Ver al canal dos haciendo un reportaje con titulo: Dama de primera, a Pilar Nores... no es de sorprender artículos como este :)
Realmente que la "señora" Karp se paso de fresca (que diplomatico no?), sin embargo es casi seguro que seguira riendose de todos nosotros desde su comoda mansion parisina, asi es el Peru pues..
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